El reconocido escritor estadounidense John Williams escribió quienes muchos nombran como »la novela perfecta» titulada Stoner, aquí te mostraremos una reseña, sinopsis y más.

Sinopsis

El libro habla de una vida normal de un hombre, con sus peculiaridades, como todas sus alegrías y tristezas. Un libro sin choques ni adrenalina, sin acción emocionante ni un final sorprendente. Solo conocemos la vida plena de Stoner. Lento y sin embargo, el libro se veía genial.

Reseña del Libro Stoner

El crítico literario Morris Dickstein eligió la solemnidad como el adjetivo más apropiado para describir la penúltima novela de John Williams. El epíteto contundente y definitivo se materializó en una revisión publicada por The New York Times que ya en 2006 anunció sin mucha importancia que este trabajo se está agregando al ecléctico catálogo del NYRB (New York Review Books).

Esa impresión puede considerarse el primer intento de salvar del frío olvido a una novela que los críticos y expertos todavía se preguntan cómo puede ser tan desconocida. “Lo único que estoy seguro es que es una buena novela; con el tiempo, incluso podría considerarse una gran novela”, dijo el autor a su agente literario poco antes de que se publicará. La primera edición alcanzó poco menos de 2.000 copias, pero lentamente, con la velocidad incierta del boca a boca, y después de varias décadas de reediciones constantes, el tiempo que habló antes, aunque tarde, demostró que tenía razón.

John Edward Williams (1922-1994) fue un escritor norteamericano de pocas novelas. Cuatro para ser exactos. Profesor universitario y doctor en literatura de la Universidad de Missouri. Un tipo que alternaba sus clases con una pasión y un amor excesivo por el arte de las letras.

Fue poeta, novelista y uno de los principales miembros del programa de escritura creativa en la Universidad de Denver, donde ha enseñado durante más de tres décadas. Hijo de César (1972), número cuatro y el último de sus cuentos, ganó el prestigioso Premio Nacional del Libro. Fue gracias a este reconocimiento que otra novela anterior (Stoner, 1965) comenzó a ganar un estatus de novela de culto.

Esto significaba que se volvería a publicar de vez en cuando y el número de lectores aumentaría como levadura, luego llegó a Europa y en 2012, casi cincuenta años después de su publicación, la cadena de librerías inglesa Waterstones lo convirtió en el Libro del Año. Las ventas aumentaron significativamente, aunque todavía estaba lejos de ser un éxito de ventas. En España, le pareció unos años antes al editor Baile de Sol, cuya última edición impresa corresponde a 2018. Dickstein lo definió en su reseña: “Stoner es más que una buena novela.

Stoner de Jhon Williams, es una novela perfecta, bien contada y bellamente escrita, tan conmovedora que te deja sin aliento. Si entendemos la idea de perfección como un sentimiento que surge de la alegría creada por la contemplación de un conjunto armonioso en todos los sentidos, debemos darnos cuenta de que la crítica, a pesar de su subjetividad inevitable y su amplitud inmejorable, usa las palabras correctas.

Aunque cargar un trabajo con tal atributo es depositar una gran placa sobre él, porque la posible decepción es que está en juego, incluso si es bueno, no responde a expectativas tan altas.

Sin entrar en el campo del gusto y las preferencias de cada uno, la verdad es que la novela de John William contiene suficientes virtudes y éxitos para estar muy cerca de la idea algo superficial que es la perfección.

El extraordinario Tom Hanks nos sugiere su lectura: Es sencillamente una narración sobre un chico que va a la universidad y se convierte en maestro. Pero es una de las cosas más fascinantes que he encontrado. “¿Y es Stoner realmente lo es?», William Stoner, hijo de granjeros nacidos a fines del siglo XIX, va a la universidad para estudiar el programa de la nueva Facultad de Agricultura.

Allí descubre su profesión literaria y termina con un doctorado en filosofía. Decide convertirse en maestro y practica como tal hasta el día de su muerte. John Williams nos da todo el argumento de Stoner en las primeras veinticinco líneas de la novela. Dos párrafos donde, como introducción, contará lo que sucederá en las casi trescientas páginas que quedan.

Pero nada destruye la fiesta porque los eventos importantes, como en la vida, son solo referencias a distancia, la existencia existe en la niebla que queda entre ellos. Y ahí es donde Stoner revela su potencial. Una historia simple que se cuenta de una manera simple, con una prosa hermosa, fría e increíblemente precisa.

John Williams era nieto de campesinos, estudió y obtuvo un doctorado en la Universidad de Missouri, enseñó como maestro, se casó, tuvo descendencia y dio rienda suelta a sus preocupaciones literarias hasta el día de su muerte.

Las similitudes entre la vida del escritor y el protagonista de su obra, William Stoner, nos llevan a pensar que la novela tiene una carga biográfica considerable, aunque el autor insiste en que «es una obra de ficción» y que «no es el personaje retratado», no se basa en ninguna persona viva o muerta, ni en ningún evento, reitera.

Dejando a un lado, la novela Stoner logra transmitir una realidad pesimista a partir de la desalentadora sobriedad de una escritura pura que logra ser tierna y despiadada. Se describe una existencia donde los momentos felices son escasos y los malos tiempos acechan y perduran.

La vida misma en una era que fue atravesada por el fuego de dos guerras mundiales, que como curiosidad sabemos que el autor acordó luchar en la segunda, mientras que su protagonista se negó a hacerlo en la primera.

Lo cierto es que biográfico o no, entre sus páginas se produce algo real, reconocible y no con poca frecuencia disuasorio. No es una historia de eventos extraordinarios o imposibles, el esfuerzo no siempre es recompensado o los objetivos se alcanzan necesariamente. Tampoco es un pozo oscuro de impotencia y depresión; a veces hay pocas cosas que quieres o incluso mejores de lo que planeaste. En resumen, es la historia de una suma desigual de decepciones y satisfacción que, en su desproporcionalidad, logra un equilibrio perfecto.

Antes de que Stoner se publicara por primera vez, Williams transmitió a su agente el temor de que la novela entrará en el círculo empresarial bajo la etiqueta de novela académica. Sospechaba que esta clasificación sería, como es probable, en detrimento de las ventas.

Pero la verdad es que no es fácil adaptar una novela como Stoner a un género específico. Digamos que es una novela académica, al menos técnicamente, porque los personajes y la trama pertenecen o suceden en las profundidades del entorno universitario.

Lo que sucede es que hay más de una historia de rivalidades entre profesores, calificaciones y burocracia administrativa. Aunque la universidad sirve como el escenario principal donde viajan los hechos que construyen la historia, el concepto va más allá de lo concreto para ubicarse en un entorno filosófico que garantiza el existencialismo a través de la dignidad del fracaso y el valor de la integridad y el esfuerzo moral. «Es para las personas como nosotros que la universidad existe para el mundo eliminado».

David Masters, un personaje secundario con una aparición muy breve pero cuya influencia es un eco constante que resuena en toda la novela, para Stoner es un diálogo vergonzoso y brillante donde reflexionan con mucha ironía sobre lo que significa el Templo del Gran Conocimiento. Es la idea que se mantiene y controla constantemente las acciones de Stoner y es la esencia que domina, más allá de la perfección, en esta carta de amor en forma de novela. La literatura como salvación y la universidad como refugio.

Opinión de los lectores del Libro Stoner

A continuación mostramos algunas opiniones de los lectores de Stoner, en relación a la historia que se desarrolla en el Libro:

«Excelente libro, la verdad me sorprendió mucho, se me ocurrieron recomendaciones de Internet y tuve un poco de desconfianza, pero no solo no me decepcionó, sino que me sacó de la primera página y me dejó el vacío que dejan los buenos libros cuando lo cerré. Si analizamos la acción, realmente no sucede demasiado, pero está tan bien escrita que realmente te identificas directamente con el personaje, vives y sufres lo que le sucede a Stoner. Muy recomendable por los libros que ponen su marca.» Fabio Andrade

«Extraordinario, una novela es buena cuando se va haciendo diferente de cuando comenzaste a leerla. Esto ha sido Stoner para mí. Te hace reflexionar sobre el significado de tu propia vida. ¿Quieres ser como Stoner y dejar que la vida te arrastre a tu antojo o te opondrás y tomarás las riendas?.

Stoner está muerto y nos preguntamos por qué vivió ese triste pero necesario romance. Muy bien escrito, el lector supera las dudas iniciales sobre abandonarlo y continúa, probablemente no se arrepiente.» Weekend

«El libro más aburrido del año. Es más emocionante poner lápices en mis ojos que perder el tiempo leyendo esta mancha. Fácil de leer, pero no pasa nada. Un personaje totalmente débil, un completo perdedor, incapaz de luchar por lo que quiere, un espectador de su propia vida. La historia no invita a la reflexión, simplemente no quiere ser como el Sr. William Stoner, quien tal vez sea su mayor virtud.» Alexis Torres

«La historia es pura y simple, pero tiene muchos sentimientos. El contraste generacional entre los agricultores estadounidenses y sus hijos que desean una nueva forma de vida y la idea de que la literatura genera un universo paralelo a la realidad es muy interesante. Le ayuda a conocer la esencia de ese gran país en un momento crepuscular y la sociedad sureña rancia y anticuada que asfixia a algunos personajes descritos con gran ternura con los que el lector es fácil de identificar. Es un libro fácil de leer y, en mi opinión, más poderoso de lo que parece.» Moses

«He leído críticos que comentan que nada sucede en la historia, nada notable sucede en el libro, solo la vida de un hombre introvertido sin fuerza o carácter que en su vida. La vida familiar se manipula todo el tiempo sin hacer nada, y en su vida profesional lo da todo.

El libro está lleno de personajes con personalidad compleja y, en muchos casos, sin personalidad, a quienes les resulta difícil expresarse en sus relaciones con los demás y la mayoría de las veces no saben qué decir. Esto me llama la atención porque parece que el autor insiste en este tema. Debo admitir que el libro está muy bien escrito, pero en el medio ya lo estaba esperando. Afortunadamente, no es un libro muy largo.» Fernando F.

«Es una novela circular perfecta con un final espectacularmente contado. Mientras lo leía, pasé de la confusión que me causó la relación con su esposa Edith y su hija al sentimiento que algunos momentos han creado en sus aventuras vitales: el momento en que decide convertirse en maestro, la pasión y el compromiso con la literatura, la experiencia del amor en su doble lado feliz y doloroso.

Su estoicismo y paciencia en su vida familiar contrastan con el carácter que muestra en su defensa del mérito, del esfuerzo en su vida académica. Está claro que su pasión es la literatura, ahí es donde Stoner pone todo su ser, el que esconde detrás de las convenciones sociales.

De la lectura de esta novela queda claro que toda la vida, incluso lo que parece más soso, puede ocultar momentos heroicos, que la dignidad no necesita grandes gestos, sino que todos los días tenemos la oportunidad de defender a la criatura a la que aspiramos.» Elvira G.

Ha sido todo por este artículo, le invitamos a leer: La rebelión de las ratas y Dispara, Yo ya Estoy Muerto

(Visited 2.431 times, 1 visits today)